Crear una tienda online con Oleoshop es muy fácil y, como Shopify, no requiere ningún tipo de conocimiento informático. Puedes probarla gratis durante 30 días y solo debes elegir plantilla, volcar catálogo, configurar formas de pago y de envío y listos.
Uno de los puntos fuertes de OleoShop es que te permite “pintarte tu tienda al óleo” arrastrando y configurando elementos en cada una de las páginas que puedes crear desde cero en tu backoffice (con el clásico gestor drag&drop).
Su precio es superior al de Shopify. El plan mínimo es de 19€ al mes pero no te cobran ningún tipo de comisión por lo que, a final de mes, solo pagas esos 19€, sin sorpresas. El hosting que tienes no tiene ningún tipo de límite de transferencia mensual y, además, incluye un blog y 1GB de almacenamiento.
OleoShop puede escalarse en funcionalidades pagando por un plan superior mensual.
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